Somos el ángel y el diablo
Y la verdad, desde un
principio
Nadie me dijo que yo iba a
ser el malo.
No sabía que tenía la
capacidad
De hacerle daño a quién
mas me quería.
No supe cuándo se
intercambiaron los papeles
En mi joven vida,
De yo ser la herida
Y ellos los malos.
Ahora tú eres el mayor
herido
En ésta guerra que ya lleva
casi dos años,
A pesar de todo,
Te has mantenido vivo aunque
la sangre
Haya llegado hasta el río.
Y te admiro por eso, no sé
que haces
Con alguien que solo tira
balazos
En vez de tirar besos.
Yo tampoco sé que hago
contigo,
Tú, mi ángel caído,
Desde siempre me has
mantenido
Aunque yo no supiera darte
cobijo.
Siempre te he visto
inmerecido para mí,
Yo creí que los diablos
viajaban solos;
Ellos no se merecen ni el
infierno.
En ésta guerra que ojalá
nunca acabe
Debido a mi masoquismo,
También he acabado hecha
añicos,
Con las lágrimas
transformadas en cristales sobre mi piel
Que he llegado a derramar en
momentos como éstos;
Tan fríos.
Es una pena que no sepa ser
inmune,
Pensaba que los diablos
No tenían ni amigos.
Pero ha resultado ser que el
diablo tiene miedos y sueños,
Que el diablo a veces
intenta ser bueno a pesar de sus prejuicios,
Que el diablo está
perdidamente enamorado de su opuesto,
Del ángel,
Del único invicto.
El ángel no muy listo,
Prefiere al que le hizo más
daño en la guerra,
Y como consecuencia
Caminan juntos en una
batalla perdida desde el principio.
Tienes algo espicial que transmites en tus escritos y es precioso.
ResponderEliminarSimplemente increible
fascinante me he quedado absorvido en la lectura.
ResponderEliminarlos miedos y los sueños son universales, por muy diablo o ángel que se sea, siempre se tendrán. bonito texto.
ResponderEliminar(saludos)