A veces nos advierten
y lo dejamos pasar pero créeme cuando te digo que no hay ni un cielo ni una
tierra que pueda sostenerme más que tu sonrisa. No hay medida para contar
cuantas veces he pensado en estar encima de ti, sin nada que nos pueda separar,
sólo el calor de nuestros cuerpos.
No tengas miedo me
susurran algunas palabras, puedes hacer el presente tuyo como la primavera al
triste abril. No tengas miedo te digo, que el azul del cielo no mira mi
canalillo cuando paseo.
Y sí, a veces vuelvo a
ser yo cuando dejo de pensarte; si es que hay fórmula para afirmar eso, y aquí
escribiendo(te) palabras sin sentido intento describir que no hay curas para un
amor tan efímero. No tengas miedo, te vuelvo a decir, que las gotas que
recorren mi cuerpo cuando me ducho sólo saborean lo que un día será tu imperio.
Y por querer(te)
quiero.
Que pagues tu peaje en
cada parada de mi cuerpo, que sea un viaje con ida pero sin vuelta. Te quedes a vivir en mí y yo pueda descansar
en tus lágrimas cuando vaya a morir.
Y por querer(te)
puedo.
Morderte e inyectarte
mi veneno, que no hay sonrisa más
sincera que cuando me estás mirando. Y si hay paraísos, yo ya los encontré hace
tiempo. Por querer puedo ser Eva y comer(te) la manzana prohibida. Tú
absolución sería mi regalo de cumpleaños.
Y por querer(te)
tengo.
Ganas de besarte y que
no haya desgaste, porque hasta desgastarnos sería ponerle un final y yo quiero
besarte hasta lo más eterno. Por querer tengo una sonrisa dibujada en la cara
hasta cuando duermo.
No sé escribir poesía
ni versos, sólo sé describir con palabras y sin quedarme satisfecha todo lo que
siento. (por ti)
No hay comentarios:
Publicar un comentario